Paseos de azahar

Aún con lluvias que soportar
recordamos los anhelos
que arrastramos por el suelo
desde la caída otoñal.

Ya es momento para observar
las golondrinas en vuelo,
ya reconocen el cielo
al que debían retornar.

Ya va tocando celebrar
el festival de los sueños,
que convierte al más pequeño
en alguien digno de admirar.

Ya tus bóvedas de azahar
engalanando el paseo,
van perfumando y las veo,
muchachas por avergonzar.

Ya corresponde el olvidar
las candelas del invierno,
y acercarnos a otros fuegos
que nos habrán de calentar.

Que ya es hora de remontar,
darle sentido a este cuento,
abandonando lamentos,
que no es momento de llorar.

Ya se permite trasnochar,
darle pasión al momento
tomando por alimento
los besos que me quieras dar.

Imagen de la calle Porvera, en Jerez,
destacada por esta cúpula arbolada,
que aunque no de naranjos, en este caso,
éstos sí se distribuyen por toda la ciudad.